Publicado el 6 de febrero de 2018
Las líneas porcinas de Hendrix Genetics triunfan en América del Sur y Central
A través de Hypor, su marca de porcino, Hendrix Genetics está experimentando un crecimiento espectacular en Latinoamérica. Desde sus extraordinarios productos, con una excelente relación calidad-precio, hasta su práctico servicio de atención al cliente, son diversos los factores que contribuyen al aumento paulatino de la cuota de mercado de Hypor en esta región. El éxito que estamos experimentando aquí ejemplifica los magníficos resultados de nuestro enfoque empresarial.
¿Cómo era el mercado hace unos años?
Hypor se había establecido ya en unos cuantos países, como México, Colombia y Ecuador; sin embargo, el resto de Latinoamérica —a excepción de Brasil— estaba fuertemente dominado por un único competidor que gozaba de un virtual monopolio. Los efectos de este monopolio en los clientes eran una oferta limitada, un servicio de atención al cliente deficiente y un servicio técnico escaso o inexistente. Así, se hacía imperativo un cambio. Lo cierto es que la situación en Latinoamérica, en lugar de ser vista como un obstáculo, acabó resultando una gran oportunidad. Estaba claro que para lograr el éxito, Hypor tenía que ofrecer todas aquellas cosas que no ofrecía la competencia.
Nuestra fórmula para el éxito
El primer paso era comunicar a cualquier cliente potencial que Hypor es una de las divisiones de Hendrix Genetics. Posiblemente algunos de esos clientes no hubiesen oído hablar de Hypor anteriormente. No obstante, la sólida presencia de Hendrix Genetics en sectores relativos a otras especies en toda Latinoamérica era una clara puerta abierta para Hypor. Una vez hechas las presentaciones, el segundo paso consistía en dar información sobre sus productos, su gran calidad y su rendimiento. Además, se trataba de estar ahí, a lo largo de todo el proceso, con servicios de atención al cliente y especialistas con gran experiencia: desde técnicos hasta nutricionistas, genetistas y expertos en líneas de machos y hembras.
Un trato de Gran Cuenta para todos nuestros clientes
Cuando irrumpes en un mercado prácticamente monopolizado por la competencia, el mayor valor son tus clientes. Un caso en el que esto se hizo patente fue el de Perú. Allí, uno de nuestros primeros clientes fue un pequeño ganadero. Pese a su limitado tamaño, le ofrecimos todo el apoyo necesario para iniciar su actividad con éxito. Y no nos equivocamos, pues la inversión resultó ser de lo más rentable. En convenciones, seminarios y otras reuniones del sector, ese cliente se convirtió en nuestro principal defensor y medio de difusión entre los demás ganaderos; él fue, de hecho, la clave que nos abrió gran parte del mercado porcino peruano.
Cuando empecé a trabajar para Hendrix Genetics, me prometí que en cinco años Hypor se convertiría en la empresa de genética porcina líder del mercado latinoamericano. A día de hoy sigo creyendo firmemente en mi promesa, mucho más que antes.