Publicado el 22 de enero de 2019
Inteligencia artificial: la auténtica apuesta
Toda empresa genética que no destaque en la carrera de la inteligencia artificial, acabará quedándose atrás. Este fue el mensaje principal de una de las últimas charlas impartidas en el prestigioso Banff Pork Seminar, celebrado en Banff (Alberta, Canadá). Por suerte para los clientes de Hypor, nuestra empresa se sitúa a la vanguardia en lo que respecta a esta tecnología punta.
«En Hendrix Genetics, recopilamos millones de datos diarios sobre fenotipos, genotipos, imágenes ecográficas, vídeos y señales de sensores», decía Bram Visser, genetista de la empresa. «Al mismo tiempo, buscamos siempre nuevas formas de utilizar esos datos de manera innovadora para mejorar nuestros programas de selección. Siempre intentamos trabajar con expertos de otros campos con los que generar colaboraciones útiles para nuestros clientes».
Uno de los mejores ejemplos de dichas colaboraciones es el proyecto de investigación en inteligencia artificial que estamos desarrollando con BrainCreators, un grupo de expertos de Ámsterdam con décadas de experiencia en este campo. El objetivo del proyecto es utilizar la inteligencia artificial para la predicción de caracteres individuales a nivel de matadero antes de la fase de transformación. Con ello, los genetistas podrían vincular distintos genes a caracteres de interés para el sector, como la dureza, la grasa intramuscular, el peso neto en canal y el sabor.
En su charla, Bram Visser explicaba que la genética es una herramienta de lo más potente, y que por eso Hendrix Genetics está invirtiendo una enorme cantidad de tiempo y dinero en intentar establecer esas conexiones clave entre genes y caracteres. Si logran determinar qué genes producen cada resultado esperado, los científicos podrán orientar los programas de selección de manera que les permitan alcanzar los objetivos deseados. En porcino, el reto reside en la dificultad de hacer un seguimiento y estudio adecuados a lo largo de la cadena de valor una vez que los cerdos se envían a matadero y pasan a transformación.
Fue precisamente ese reto el que llevó a Hendrix Genetics hasta BrainCreators, y el que, al mismo tiempo, explica el entusiasmo puesto en esta colaboración.
Para Hypor es un orgullo ser uno de los primeros equipos de Hendrix Genetics que trabaja con inteligencia artificial. Al aplicar esta tecnología, nuestro objetivo es aumentar la precisión de la selección para una serie de caracteres difíciles de medir en el animal vivo. La idea de esta inversión es crear valor a lo largo de toda la cadena, desde la parte genética hasta el momento de la transformación.
De cara al futuro, el potencial de la inteligencia artificial en cuanto a posibilidades de desarrollo para el sector porcino es ilimitado: gafas especiales que hacen que cuando un determinado cerdo necesita atención se ilumine; imágenes 3D que permiten detectar el espesor de cada cerdo y establecer su peso de forma más precisa; o cámaras de última generación que revelan puntuaciones musculares. Este es un mundo feliz, en el que Hypor y Hendrix Genetics trabajan mano a mano para beneficio de todos sus clientes.
«Hoy en día ya es evidente que la inteligencia artificial está cambiando el mundo tal y como lo conocíamos. Al igual que Amazon, Google y Apple, Hendrix Genetics considera la inteligencia artificial como un componente fundamental de su futuro. Colaboraciones como la establecida con BrainCreators simbolizan la adición de un nuevo elemento a nuestro conjunto de herramientas tecnológicas, además de una nueva aportación de valor a nuestros clientes mediante la innovación, la colaboración y la sostenibilidad».
